Y a veces me encuentro tan asfixiada por el mismo aroma de este vacío que ya nada se visualiza. Intento huir y ser parte de otro cuento. Quisiera ser una princesa. Aunque bien asumido tengo que las princesas no siempre son felices, triunfan y viven en un castillo de cristal. Después de todo lo deseo aún sabiendo que me puede llegar a hacer mal y que mi cuento puede terminar antes de lo previsto. En lo mismo, no quiero que haya personas. Quiero estar sola, sin nadie, como ahora, como siempre. Podría decir que estoy viviendo esa historia respecto a eso, ya que nadie parece verme. Pero una vez, quiero estar sin personas alrededor. Y puede sonar contradictorio, pero estas palabras que estoy escribiendo no son mas que puros deseos que después se almacenan en el rincón de los juguetes perdidos.
Necesito. Quiero. Busco. Corro. Escapo. Vuelo. Me quedo. Tanto para nada.
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